“¡No subas al avión! ¡Va a explotar!” – Gritó un niño sin hogar a un empresario rico, y la verdad dejó a todos sin palabras…
“¡No subas al avión! ¡Va a explotar!” La voz fue aguda, urgente, y atravesó el bullicio de la terminal del Aeropuerto Internacional John F. Kennedy. Decenas de viajeros giraron la cabeza, buscando la fuente. Cerca de unas máquinas expendedoras estaba un muchacho delgado, con la ropa hecha jirones, el cabello sucio y una mochila rota … Read more